Allan & Manuela

Somos Allan y Manuela, y nuestra historia es la prueba de que el destino siempre sabe lo que hace. Nos conocimos cuando ambos teníamos 22 años, y desde el principio nació una gran amistad. Éramos diferentes, pero nos completábamos mutuamente, capaces de confiarnos todo, aunque la vida nos había llevado a vivir a kilómetros de distancia. Fuimos amigos a distancia por muchos años y, a pesar de ello, el destino nunca dejó de tejer su trama. Idas y vueltas, entre cumpleaños y fiestas de fin de año. Pasaron muchos momentos de subidas y bajadas. Hasta que, un día, sucedió algo increíble: nos volvimos a ver y, desde ese momento, todo cambió (aunque, para ser sinceros, ya estaba cambiando desde hace un tiempo). Así, aquella vieja amistad se transformó en algo mucho más grande: un amor que, quizás, siempre estuvo allí, esperando el momento adecuado para revelarse. El amor, este amor fue oportuno y ha crecido hasta llegar a este momento. Y entonces, para aquellos a los que les gustan las historias de amor... ¡aquí estamos!